Revista Nos Disparan desde el Campanario Año II Nro. 35 “El Intendente de Coronel Dorrego llama a la delación civil como política sanitaria” por Gustavo Marcelo Sala

 


En Coronel Dorrego nuestros gobernantes no se declaran abiertamente neoNazis porque no pueden, no por falta de vocación, la praxis lo revela. 


La delación civil aplicada operativamente por el Estado es acaso la herramienta política más nociva y abyecta que puede utilizar un gobierno para controlar socialmente a su población, si es que tal cosa, ergo controlar, es admisible, gobernar no es controlar ni administrar solamente, gobernar, en su esencia es una ciencia social, en la mayoría de los casos y lamentablemente  en manos de analfabetos con fines determinados que confunden los términos. El fascismo, en todas sus vertientes, la ha aplicado como sonar y radar para detectar distancia y volumen de la oposición, recientemente lo hemos vivido durante el gobierno de la UCR Cambiemos y su alianza con el poder real a través de la lawfare y su sistemática persecución al kirchnerismo.

Tristemente el sistema fue aplicado en centenares de ocasiones durante la historia y siempre obtuvo el mismo resultado, mayor injusticia, mayor crueldad. En una nueva muestra de incapacidad e ineficiencia en el trato de la pandemia el ejecutivo de Coronel Dorrego, exhibiendo de manera natural su fascista encarnadura, ha decidido adherir a la teoría chivata y poner a disposición de los soplones de la aldea, cosecha primera prensada para hacer el peor aceite, una línea abierta para denunciar a aquellos que organizar encuentros de no convivientes (¿?). (Según el Dr. Zorzano, director de salud, la gente del común estaría habilitada, tiene la capacidad y la información para decretar quién se acuesta con quién para determinar afinidades convivenciales o no convivenciales).. Un disparate solo posible en la mente de un desequilibrado…

La exponencial disparada de casos, la nula reacción ante el hecho y las escasas prestaciones médicas existentes hicieron ingresar en estado de emoción violenta y pánico a las autoridades en cuya desesperación por exhibir que hacen algo al respecto ponen nuevamente al individualismo, en este caso al SER delator, la suerte sanitaria del distrito. LEER AQUÍ...  Finalmente, cerrando dos semanas exitosas de una seguidilla de stand up y recitales mediáticos entre relacionistas públicos pautados, el Intendente aseguró que estamos ante la presencia de un virus local, variante no identificada,  de extrema velocidad a la hora del contagio (La Voz del Pueblo). Se trataría del Covid-UCR-22, cepa que no solo posee todos los elementos virales que tiene el Covid-19 sino además incluye los virus de la imbecilidad y la ignorancia, agregados que provocan en las personas alteraciones intelectuales que no permiten racionalizar las consecuencias de sus actos, sobre todo durante los comicios. Tal vez la delación pueda ayudar a descubrir e identificar la malvada y novedosa cepa, aunque creemos que como aquí nos conocemos todos pasará políticamente desapercibida, o se responsabilizará a un perejil... 


Cuando estas desorientado y no sabés qué trole hay que tomar empezás con que el asiento del acompañante no debe ocuparse, incluso para aquellos que la noche anterior durmieron juntos, continuás con que las restricciones fueron y son al divino botón, seguís con que estamos como en Enero, por tanto que viva la presencialidad, y que vamos a fase 4 para hacerle un favor a Bahía y su colapso, no por nosotros, que vamos genial, y terminás desarrollando una estrategia de delación vecinal porque no podes controlar la circulación interna y ya no sabés qué hacer con los pacientes, después que tu propia gente hizo cualquiera. Cuando estás desorientado y no sabés qué trole hay que tomar y en tu total fracaso de vivir, ni en tiro del final te va a salir. Pero no es necesario tal extremo… con tu renuncia a la Intendencia alcanza, asegurábamos hace pocos días.

Estamos delante de un gobierno delator que además, induce y recompensa a la acusación. 

Un gobierno de buchones que sueña una sociedad de alcahuetes convirtiendo a los integrantes de esa sociedad en ortibas. (https://www.hamartia.com.ar/)... y que para peor no informa, o mejor dicho tiene sus canales de información cooptados y a precio vil... 

El goce de ser delator del poder y con ello considerarse útil, reconocido y ciudadano “que pertenece” es la máxima aspiración del alcahuete, sea cual fuera la razón que lo motive, miles de ojos bisoños estarán observando por entre las rendijas de las persianas dorreguenses, bajo estricta oscuridad, quién ingresa o quién egresa de tal o cual lado, y el número telefónico a utilizar estará a mano bien legible para su pronta utilización, algunos, sospecho, ya lo habrán agendado en sus celulares. Además todos sabemos que nunca el poder real será delatado por el vulgo, y eso el ejecutivo lo aprovecha sin ponerse colorado debido a que forma parte de ese estamento, el delator le responde íntegramente a quien tiene el mazo, por lo tanto pasará por alto sus erratas, sus miserias y sus contagios.

Esta misma estrategia no es original, fue utilizada hace pocos años, en el 2016 más precisamente, por el Intendente neofascista del distrito de Gral. Pueyrredón, también perteneciente a la alianza UCR Cambiemos, Carlos Arroyo, pero so pretexto de las fiestas clandestinas en Mar del Plata relacionadas con el consumo de alcohol fuera de las horas autorizadas. Los buzones antinarco, popularmente extendidos, son una clara referencia de la inclinación que poseen los políticos a favor de la delación, más allá de los paupérrimos resultados en la lucha contra el narcotráfico, logrando como máxima detener a consumidores personales con cantidades que mueven a risa, o aquel nefasto 0800 que propuso Macri para denunciar a los militantes estudiantiles. Leer aquí.. Ergo: No se declaran abiertamente neoNazis porque no pueden, no por falta de vocación, la praxis lo revela. 

El fracaso del gobierno del Intendente Reyes y su lugarteniente Zorzano, en tanto la pandemia, se resume a esta neofascista iniciativa; esto es resignarse a que sea la acción individual de los buchones de turno quienes les paren la cantidad de contagios; ante el panorama, ellos se han rendido a su inacción, se sienten víctimas de su inoperancia e inutilidad mientras miran Netflix después de las siete de la tarde. Son responsables, lo saben, pero hacen que lo ignoran, delegando en sus súbditos y sus heraldos pautados la pulsión social que genera el dilema.

La estupidez es colectiva, no individual como mienten a diario, porque aquí la sociedad es responsable, gobernantes y gobernados, provocaron que tuviéramos que regresar a fase 2, dicho sea de paso fase muy generosa, cuestión que nada cambia si no se trabaja para que esa premisa sea respetada. Jamás el gobierno de Coronel Dorrego, alineados con la estrategia nacional destructiva de la UCR Cambiemos hizo valer las recomendaciones, no hay razón alguna para esperar alguna modificación en la conducta de los psicópatas que nos gobiernan y menos de sus fanatizados y crueles entusiastas.   

 

Hace un tiempo decíamos sobre el control, el caos y la libertad…

http://lasbalasdelcampanario.blogspot.com/2018/11/entre-el-caos-el-control-y-la-libertad.html

 

 


*Gustavo Marcelo Sala. Editor. Escritor

 

 

 


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