Nos Disparan desde el Campanario... Los pobres heredarán la tierra, pero no los minerales que posee, solo heredarán la tierra como acepción de suciedad… (Paul Getty)... por Gustavo Marcelo Sala

 

El neoliberalismo logra superar la tasa de ganancia del capitalismo industrial gracias a la financierización de la economía. El sueño para el capital privado: Ganar mucho sin obligación laboral (sin tener que “lidiar” con trabajadores) y sin base material equivalente (medios de producción), forjando un nuevo mundo económico: especulativo, improductivo y ocioso, afirmó Miguel Ángel Bayón.

El neoliberalismo ganó nuevamente corriendo otro paso más el eje de discusión. Ya no se va a discutir la actualización salarial vía paritarias, ya no se van a discutir los niveles de desocupación ni los aumentos en el costo de vida con su correspondiente descenso en su calidad, ni la grotesca trasferencia de fondos hacia los sectores más concentrados. En dichas cabezas de playa han logrado asentar sus praxis y su dialéctica gracias a la desmovilización y a la apatía, tanto político-partidaria como sindical. Siguen avanzado, ahora vienen directamente por los derechos, tanto de los trabajadores registrados, los de los no registrados, como los del sector pasivo. Desde principios de los noventa, excepto alguna primavera, este es el plan que diseñó el neoliberalismo bajo la herramienta Reingeniería ( Michael Hammer y James Champy)

En su apología sobre las crisis Milton Friedman las observa como el elemento cardinal, como el factor y causa esencial para el cambio socio-económico, por eso habla de las crisis reales o percibidas, ergo, creadas con fines determinados, tal como ocurrió cuando asumió Cambiemos en diciembre del año 2015. Uno de los padres del neoliberalismo afirma que de ese modo y desarrollando alternativas a esas crisis se pueden profundizar estrategias políticas en donde lo imposible se transforme en inevitable, y digo para mí, por ejemplo que buena parte de la sociedad admita como posible la instalación de un modelo cuyas columnas son la exclusión, la concentración de la riqueza, el endeudamiento, la financiarización de la economía, el saqueo de sus bienes y riquezas, la detención de opositores y la represión ante la protesta social...

Napoleón sentenció que "la única razón por la cual los pobres no cargaban contra los ricos era la religión". Sin lugar a dudas, y dicho freno se ha mantenido intacto con el tiempo, pero temo que a ella se le han agregado varios factores adicionales, por caso la profundización del discurso de autoayuda, el fomento del emprendedurismo y la coacción que ejerce el capitalismo utilizando a la carencia como ariete. Es notorio como el poder real necesita y te recomienda hacer ejercicios para tu felicidad, ellos a la par se quedan con el desagradable y siempre despreciable dinero. Las calzas y las sudaderas no tienen bolsillos argumentan. Es más, te precisan sano, fuerte, egocéntrico, entretenido físicamente y bien boludo intelectualmente para que no pienses y te puedan seguir explotando con la conciencia tranquila, tal como afirmara Bertrand Russell. Esta economía de diseño, necesita oposición y sindicatos de diseño, represión de diseño, una mayoría de diseño y medios de comunicación de diseño.

De leer y analizar críticamente ni hablar porque según ellos ese ejercicio mental conduce a la depresión, no sea cosa de que entiendas más de economía y puedas llegar a revisar determinados mandatos mass media. Esto no es otra cosa que un sofisma cuya razón de ser de basa en los supuestos beneficios del pensamiento inmaterial en tiempos de crisis, debido a que se trata de categorías imposibles de relacionar, a más no sea por el perverso antojo de quien la anuncia.