Nos Disparan desde el Campanario Un año… Un hueco… de Yael Frankel

 


 




Ella se fue

y en su partida

se llevó algo mío.

Me dejó un hueco

¿Y ahora?

Trato de llenarlo,

tratan de llenarlo,

pero sigue ahí,

sin importar lo que yo haga.

Incluso hay días

en los que se adueña de mí

y también de otros.

Un hueco puede parecer

un lugar desolador,

y sin embargo

cada día me doy

una vuelta por ahí,

porque es un sitio cálido,

inspirador,

un sitio reparador,

y sobre todo, seguro.

Un sitio diferente a todos,

a dónde puedo regresar

cada vez que quiera.

Es que hay huecos

y huecos,

y creo que el mío

me acompañará siempre,

porque sin ese hueco

ya no soy yo.

¿Quién no ha sentido alguna vez

un hueco en el pecho?

 

 

 

 

Comentarios

  1. DORIS CECILIA ETZEL2 de abril de 2025, 10:48

    Hueco que duele...y a su vez se llena con hermosos recuerdos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario