Revista Nro. 15 La cueva de la banda de ladrones por Carlos Baffoni


“La crítica de la religión desemboca de que el ser humano
(no la esencia humana) es el ser supremo para el ser humano,
y por consiguiente, el imperativo de echar por tierra todas las
relaciones en que el ser humano es sojuzgado,
humillado, abandonado y despreciado”

Carlos Marx. Introducción a la Filosofía del Derecho.1844.




LA CUEVA DE LA BANDA DE LADRONES


          Tengo que reconocer que me cuesta escribir esto. Porque para mí significa una absoluta toma de distancia de ciertas posturas que he tomado a fin de evitar la soledad, que es lo que más tememos los humanos. Pero, todo tiene un costo. No por nada, algunos psicoanalistas pagaron y pagan un precio muy alto por su honestidad, como por ejemplo W. Reich, con  su “Miedo a la libertad”, escrito en plena dominación nazi.  El psicoanálisis argentino está en una crisis profunda debido a negarse a admitir la subversión que produjo Lacàn en la doctrina freudiana. Se dicen sus seguidores, pero rechazan las consecuencias de dicha subversión. El Principio del Placer, categoría freudiana fundamental fue subvertida por el maestro francés. Es sólo el corralito donde se está permitido gozar. El  paraíso terrenal donde se tiene todo lo que quieras, siempre y cuando hagas lo que un Dios tiránico (Superyo) te indica. Ahí “no te falta nada “ , tenés todo, así que ni se te ocurra comer la manzana del conocimiento. El placer según las reglas de un Otro. El “Más allá” del principio del placer, propuesto y a  la vez negativizado por el maestro vienes, fue tomado por Lacán y transformado en la meta analítica esencial. La realización de lo imposible y la liquidación del padre freudiano. El sujeto lacaniano es el que se autoriza a sí mismo amo es su inconsciente, o sea su verdad. No, ningún saber venido de afuera, sea cual fuere. La soledad, que no es desolación, es su destino. O sea, la libertad.-
                El  Marx  de 1844, fue imputado de “filósofo” por el estalinismo francés, a la cabeza de Althusser. “El joven Marx”, dijeron. Una manga de atorrantes. Niegan lo profundamente libertario de la doctrina marxiana, con la maniobra de “recuperar” al Marx “científico”, “maduro”, y dejar atrás el “joven”, el loquito hegeliano, idealista. Y les retorna, les explota en la cara con éstas frases recuperadas por gente honesta.-

                            EN EL TEMPLO

              En los evangelios sinópticos, Jesús denuncia al templo como “cueva de ladrones”. Es decir, como institución regida por la ética de los ladrones. (Hinkelammert, “El grito del sujeto”). En el evangelio de Juan lo denuncia como “casa de comercio”, (emporio), también regido por la misma ética. Frente a ésta ética Jesús pone el Reino de Dios. Cualquier evangelista, católico, etc., no aceptaría fácilmente la escritura ésta. Porque se verían obligados a revisar sus asuntos teológicos, el asunto del “diezmo” y otros negocitos, y el insomnio (si quedó una pizca de la ética del “Maestro” en sus corazones) los atraparía irremisiblemente.-
                            

                     LA PLAGA

             Recurro, como es evidente, a la ironía, porque es la única forma de hablar de gente muy miserable, que aunque se vistan de seda…-
                     La referencia cristiana  orientada al bien común que surge en la Edad Media, es eliminada por la sociedad burguesa y sustituida por el interés general. Ya estamos hablando del primer miserable, claro, luterano él: Adam Smith. Qué hace entonces el caballeroso escocés: Le saca el polvo a Platón, para quién la ética de los ladrones, era la única válida. Claro, terminó rajándose de  Grecia de noche y en un botecito. El señor Platón, quién me hace acordar a la endemoniada lógica, por llamarla así,  de Macri and  Company, elucubra esto, en realidad una paradoja: Si todos se guían por la ética de los ladrones el interés de todos como interés general está  mejor guardado, y resulta una armonía preestablecida producida por ladrones.-


                             AGUANTAR MI AMOR…

          El culto filósofo escocés, profesor de Ciencias Morales en Glasgow, bien luterana claro, desemboca así en el cálculo del límite de lo aguantable, que explicita en su “teoría” del salario. Que es una teoría asesina (hablo aquí por Hinhelammert, a arreglarse con él, puede costar muy caro porque éste filósofo y teólogo alemán es un pesado), y es también economista, de acuerdo con la que el equilibrio en el  mercado de trabajo es asegurado por la muerte por hambre de los trabajadores sobrantes y sus familias.-
                     Quien vio “El padrino” la pesca enseguida: El jefe se preocupa por la vigencia de la ética en su banda porque es la condición de su eficacia. Se llega a reprochar a un mafioso de no ser fiel a su señora. Por ejemplo. Dentro de ella no se puede asesinar ni robar y hay normas para el trato de sus víctimas.. Se cobra “protección “según el cálculo del límite de lo aguantable. Lo más alto que se pueda, por supuesto, hasta donde aguante.-
                      El argumento de Platón de que sin ética una sociedad no funciona es válido. Pero teniendo en cuenta lo escrito más arriba, resulta claro de que una sociedad que no introduce una ética del bien llega a caer en la ética de la banda de ladrones. Por más  que esconda la discusión sobre ella. Llega al colmo de presentarse como el adalid de la transparencia y la honestidad y abanderada de la lucha contra la corrupción. El macrismo fue eso. Estamos viendo las dramáticas consecuencia: Solo resultó una cueva de bandas de la ladrones.-

                              CALÌGULAS

       “ Si no la enfrentamos, la lógica del sistema se realizará, y ella es Calígula: que quería que el pueblo tuviera un solo cuello: para cortarlo. A diferencia  de entonces, ahora el mundo es global y el pueblo y la naturaleza tienen un solo cuello. La banda de ladrones está convirtiéndose  en una banda de Calígula que quieren córtalo aunque ello signifique el suicidio".  Franz Hinkelammert. Teólogo y economista alemán, impulsor de la Teología de la Liberación en Hispanoamérica, exiliado de Chile en 1974, y radicado hace 40 años en Puerto Rico.-



*Carlos Baffoni, psicoanalista.                              




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