Revista Nos Disparan desde el Campanario Año IV Nro. 59 Lo realmente verdadero es lo que no sirve para nada… por Carlos Baffoni

 

 

I

A DIOS NO LO ENCONTRAMOS EN LA RELIGIÓN SINO EN LAS RELACIONES CON LOS DEMÁS (JOSÉ MARÍA CASTILLO. TEÓLOGO JESUÍTA)

 

"Tenéis que ser libres como el viento,

que no sabe de dónde viene ni adónde va".

Jesús de Nazareth.

 

El psicoanálisis está en crisis. Lacán decía que al revés de la religión sobrevivirá o no. Si algo define a la religión es que siempre sobrevive. El Evangelio ha sido subsumido por la religión. De ahí la crisis interminable de la iglesia católica en todo el mundo.

El psicoanálisis - que en general rechaza los evangelios - se ha convertido en una religión, con sus cultos y sus rituales institucionales en las distintas escuelas de psicoanálisis. Mi psicoanalista y maestro cerró definitivamente su escuela, le demandaban más "autoridad". O sea, que apriete. ¿No es esto religioso? Ya sabemos cómo el Vaticano aprieta a sus sacerdotes para que no se desvíen de la autoridad de la Iglesia: El dogma.

Jesús no les decía a sus seguidores para dónde se iba. "Seguidme", era su consigna. No decía a tal parte o la otra. Lo único que les proponía era que abandonaran la vida que llevaban.

El psicoanalista procede igual: “Empecemos acá sin saber para dónde vamos”. La vida seguramente cambiará. Pero no para mal. Mal está. Porque no atiende lo verdadero en su vida no siempre está en los ideales que persigue, sino en sus deseos verdaderos que descarta por intrascendentes: sus hijos, una inclinación al teatro, música, etc., el amor a una mujer, a un hombre, padres, “goces” que como decía Lacán supuestamente para el modelo "no sirven para nada" pues no son útiles, no dan ganancia, no le sirven al Otro. En una palabra, Lacán orienta al sujeto a lo que no sirve, a lo que supuestamente no da réditos, beneficios. Acaso ¿Cuándo Jesús orienta a sus discípulos hacia la atención a los humildes, desamparados, hay un rédito, ya sea poder o dinero, para ellos? Sabido es que éstos - los discípulos - se peleaban para predominar en el colectivo cristiano y el maestro los reprendía severamente.

El psicoanálisis lacaniano propone la desaparición del Yo, sede del narcisismo. La liquidación del Superyo, al que el Yo sirve, que significa la liquidación de todo saber con pretensión de Verdad. Jesús propone a Dios lugar de la Verdad. Incognoscible, trascendente, que se expresa en señales misteriosas. No anda diciendo haz esto, o esto otro. Pero es una guía ética, no moral, que opera sin que el sujeto lo sepa. Lacán llamó a éste "operador" totalmente reprimido, nunca se hace consciente: Nombre del Padre. "Dios es Inconsciente". Pagó en alto precio por ésto. Fue expulsado de la IPA - asociación psicoanalítica internacional - que lo "excomulgó" (ironía lacaniana) que tiene el tufo religioso  de la capilla psicoanalítica. Con un "simple " ejemplo " espeluznante, creo que puedo poner de manifiesto dónde lleva éstas posiciones anticristianas, "sacrofobia", a algunos supuestos colegas. Una madre me llama para atender a su hija pequeña. Le pregunto cómo me encontró. Una colega le dio mi nombre, confiesa. Me cuenta que dos psicólogas habían rechazado atender a la niña luego de entrevistarla. Los motivos no están claros. La niña padece de un síntoma serio que requiere rápida intervención. Tranquilizo a la madre, le pido que le diga a la niña que no la rechazaré, y que tiene un lugar garantizado en mi consultorio. Éste extravío ético es consecuencia de la influencia de las universidades "laicas" en el sujeto. Y de una formación "científica", antirreligiosa. Las universidades católicas tampoco son garantía de nada. Están manejadas por el clero - que significa ganancia en griego -, palabra que no figura en los Evangelios, al igual que PODER Y DINERO.-

 

II

 

SANTIAGO 1:27. "LA RELIGIÓN PURA Y SIN MÁCULA DELANTE DE NUESTRO DIOS PADRE ES ÉSTA: VISITAR A LOS ENFERMOS Y LAS VIUDAS EN SUS AFLICCIONES, Y GUARDARSE SIN MÁCULAS DEL MUNDO".-

 

La tremenda distorsión operada por las distintas religiones cristianas es enorme en relación a los Evangelios, y el daño es no mensurable. Han puesto a Dios en sus templos, lo han encerrado allí, y han tachado de ateos a quiénes desobedecen sus observancias y su rituales. A Dios no se lo encuentra allí, sino en nuestras relaciones con los demás. Los demás no incluye sólo a los humanos. A toda forma de vida, incluso a las piedras, que por algo están en el mundo. Las iglesias son refugio de las gentes que se creen salvas, por el sólo hecho de invocar a un Dios que allí no se encuentra. Cuando Santiago aclara el verdadero fundamento cristiano de religión - abandonado por las iglesias cristianas - se refiere también que a Dios se lo encuentra en los seres que sufren, viudas, huérfanos, enfermos, etc. En nuestras conductas, incluso cotidianas. "Al que te pida dale",  se refiere a esto. No es simple caridad, "dar lo que se tiene" sino "dar lo que no se tiene". El amor verdadero, según Lacán.

 

III

 

Leyendo a Franco Berardi en Página 12, filósofo militante italiano, líder de la revolución del 68, a propósito de un libro de su autoría que se llama La fábrica de la Infelicidad, nos plantea sin más sobre la existencia de una demencia masiva social, una especie de locura generalizada que no es manicomiable, encerrable.

Lacán, en una de sus últimas presentaciones de casos, allá por 1980, antes de irse dijo exaltado: Todos al asilo, todos al asilo. Más de cuatro seguros pensaron que el maestro estaba medio "chapita". Bueno, sí claro, como todos allí adentro. La demencia masiva es descrita por Berardi de una manera impresionante. Sólo tomo algo que me interesa en lo personal. Dice: “no hay gratuidad de los encuentros". Claro, lo masivo no implica que existan personas que no tengan encuentros gratuitos. Pero, en medio de la locura masiva es muy difícil estar cuerdo. Cuando dice "encuentros" se refiere al de los cuerpos. Los virtuales son demenciales para su lógica.

Es muy probable que si alguien se detiene a leer esto, cambie de "página". Para Berardi sólo vale el encuentro de los cuerpos TOTALMENTE GRATUITO, aquel que no “sirve” para nada, que no ofrece ningún más, como el...encuentro amoroso. O el de amigos-amigas que se encuentran. Lacán denomina “Goce” - que no es sexual- al que "no sirve para nada". Cuando las personas cantan entre todos, gozan, pero no es un goce sexual. El que experimenta el artista, pero no sólo, la gente que se junta a cantar, bailar, experimentan un goce a-sexual que no sirve para nada. Recuerdo que en los 80-90, cuando iba a una reunión siempre llevaba la guitarra en el baúl. No sé si hoy es posible. En las reuniones se suele pegarse o insultarse entre los concurrentes, o consumir drogas o tomar. El amor verdadero se fundamenta en que no sirve para nada. Lo útil allí no entra. Si el dinero hace su entrada, es demandado por algunos de les partenaires, y destruye el amor. Incluso en el amor verdadero se experimenta un más allá del principio del placer, o sea la realidad mentirosa en qué vivimos. Pero sobre todo, se necesita tiempo. No el tiempo regulado por el mercado, sino el tiempo del corazón. Nuestro cuerpo tiene una temporalidad no coincidente con la de la realidad. En la notación musical llamamos tempo al acontecer musical. De ahí la coincidencia del amor con el arte. E. Fromm escribió un libro que llamó El arte de amar. Seguía la ruta de Ovidio.-

El tecncocapitalismo somete al sujeto a una temporalidad enloquecida que vulnera el tempo del organismo. El ataque de pánico - no es nuevo, Freud lo descubrió en 1895, es una angustia extrema - revela el goce reprimido de la Pulsión que se experimenta como angustia para el Yo, que empuja al sujeto a DESAPARECER de la realidad a la que está sometido, o sea de los mandatos imperativos, por lo que llamamos el Goce del Otro.

Lo que no debería existir es un invento del sujeto. Nos inventamos nuestros propios Amos, al que nos sometemos. Es evidente en los vínculos amorosos narcisistas, no son verdaderos. En el amor verdadero se desea la completa independencia del otro. Su realización, la de sus deseos más legítimos.-

 

*Carlos Baffoni. Psicoanalista