Revista Nos Disparan desde el Campanario Año IV Nro. 59 POLÍTICA Elecciones Generales: DOXA O EPISTEME… por Horacio Pili

 




Antes de entrar en tema, conviene refrescar desde lo etimológico las palabras que dan título a estas líneas, habida cuenta que nos sitúan en un punto de partida cierto, desde donde iniciar un camino hacia el intento de dejar una reflexión en tanto acontecido en las últimas elecciones generales llevadas a cabo el 22/10.-

Doxa es una palabra griega que se suele traducir por 'opinión', hace diferencia entre la «vía de la verdad» de la «vía de la opinión», o si se quiere, distingue entre el conocimiento obtenido a partir de la experiencia del que se obtiene desde la rigurosidad científica

La 'doxa' se trata de un conocimiento que comprendería conjetura, fe o creencia.

Por otra parte, y en contraposición a  doxa se ubica la episteme; a veces esta última se traduce como conocimiento científico, pero solo tiene desarrollo en el mundo de las ideas (conocimiento intelectual) y no el mundo sensible (conocimiento sensible).

En resumen, y a modo de síntesis, se puede decir que DOXA es la opinión personal, sin abundar en el pensamiento crítico, analítico, contrapuesto contra bases más sólidas. EPISTEME, surge como un conocimiento casi irrefutable, fundamentado, y con cierta fortaleza de alejarse de lo meramente subjetivo para acercarse a lo objetivo.

Ahora bien, abiertas las urnas del domingo 22/10 y una vez pasada la sorpresa de un lado y del otro, empieza a surgir la tela para cortar, que por cierto es mucha, agrandada hasta lo exponencial, sobre todo con lo acontecido en los días posteriores, a raíz de los “reacomodamientos” de conocimiento público.

Aprovechemos la coyuntura para bucear en el mundo de los votantes y de los votados. Una vez concretado su voto, un migrante, que lo hace por segunda vez en nuestro país, me comentaba con una contundente simpleza, que la realidad lo supera y agobia día a día, lo empuja a un mundo de carencias. Su voto había sido depositado con la esperanza de poder trabajar y alimentarse un poco mejor. Pero era consciente, que su contexto dramático no justificaba ninguna locura. – Coherencia.

Por el lado de los votados, las dos fórmulas perdedoras que siguen a la triunfante, en un giro copernicano, inentendible e inaceptable para propios y extraños, le provoca a sus simpatizantes, una perfidia, una falta de fidelidad, de lealtad, una traición digna del más abyecto de los vivientes.

Se supone que toda estructura política está conformada por niveles de conocimientos y preparación, hábiles declarantes, con objetivos muy claros y definidos. -

Ha sido esta, una elección donde los pensamientos simples, individuales, sin tanto rebusque científico, han dado un ejemplo de honestidad intelectual, por sobre estos personajes de una vasta episteme, que no dudan en actuar con la más impune felonía hacia sus aliados, defraudando seguidores por intereses personales o facciosos. Son unos verdaderos canallas, sinónimo de destrucción.

 


*Horacio Pili

Docente de Formación Profesional

Diplomatura en Ciencias Políticas con Orientación  en Políticas Publicas y Desarrollo Social

 

 


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