Revista Nos Disparan desde el Campanario Año III Nro. 50 Postales de un país que ya no existe y el Documental “El Peso de las Cadenas”… por Favio Camargo
Nada de lo que les explique en esta
crónica va a ser mejor que el documental que les adjunto. A lo sumo revelará de
dónde surgió la fuente de inspiración. Por lo tanto me parece oportuna la
recomendación sobre un material fílmico que había visto hace unos años mientras
atravesaba una divertidísima fisura en el hombro izquierdo producto de una caída
practicando ciclocross digna de un sketch de Capusotto.
Hace unos días, como docente, tuve
que asistir a una charla en el Teatro Español de Coronel Dorrego sobre los
Valores que legó la Guerra de Malvinas con motivo de los 40 años de la gesta, aunque en realidad no se trató de un
diálogo debido a que no hubo posibilidad de intercambio, intervención,
refutación, la cosa se diseñó sobre la base de cuatro monologuistas. Para colmo de
males me habían frustrado un hermoso día de playa y el sonido se acoplaba
cortándose como hace 30 años en aquellos días del jardín de infantes, pero
digamos que le puse ánimo, dejé pasa por alto las fallas técnicas y los disgustos por un
rato e intenté obtener algo positivo de la situación.
Si en lo personal había llegado
contrariado, el primer disertante tuvo la infeliz idea de culpar a los docentes
de humanidades por la ausencia de valores, dioses, patrias, tradiciones y cosas
por el estilo…discurso que me hacía ruido y me recordaba a algo que me ponía
triste e incómodo a la vez y que me hacía encabronar bastante.
No podía irme dejando a mi clase en
banda, de no mediar mis alumnos lo habría hecho sin que me importara mucho que
me descuenten el día o me suspendiesen.
A medida que pasaban los minutos, como
docente, y más como estudiante de Historia, sabía que si no nos estaban mintiendo
al menos intentaban ocultar la verdad. No me preocupaba en lo personal, pero sí
por la mayoría de la audiencia que eran niños en esa edad en la que están
cambiando los dientes. No se merecían que los engañaran en la cara. En ningún
momento los disertantes utilizaron la palabra “dictadura”, haciendo llamativas
piruetas idiomáticas tipo: “el presidente del momento” o “el gobierno de la
época”. Nunca hicieron referencia a lo que pasaba en el país en la época de la
guerra ni tampoco el hecho de que con la guerra se pretendiera un determinado fin político adicional (perpetuarse en el poder)
en donde la soberanía de las islas era el mejor pretexto para lograrlo.
Promediando el evento noté que nadie
cuestionaba ni un renglón de lo dicho, fue allí que dos de los monologuistas se
envalentonaron tirándose por el tobogán de la imbecilidad cuando afirmaron
maliciosamente que era mentira que las armas no funcionaban, acusando a quienes
decían eso de inútiles y mentirosos por no saber limpiarlas. Otro, para no ser
menos, aseguró que nadie estuvo obligado a ir a la guerra. Como si hubiese
existido para el conscripto la posibilidad de negarse… (Por fuera de los cientos de testimonios en contrario, siempre recuerdo el de un soldado “Testigo de Jehová” al cual obligaron a ir, sin
respetar sus creencias).
En ese momento de tanta falacia
acumulada recordé cuando de niño pude ver la cobertura que hizo la televisión española
de la guerra civil en la vieja Yugoslavia, un país que de pequeño, por alguna
razón que desconozco, tenía para mí mucho encanto a nivel de interesarme por su
cine, su música, juntar postales y figuritas de sus deportistas. El hecho de
haber visto la guerra por la televisión en colores, como si fuera una película
norteamericana de bajo presupuesto, construyó en mí valores que chocan
totalmente con todo lo que se hizo para que estos pueblos que eran hermanos se
exterminaran entre sí por años. Todos decían defender a Dios, a la Patria, y
sus valores, pero destruyeron el lugar donde vivían fondeados por intereses
extranjeros, estadounidenses y alemanes, que le vendían a cada una de las
partes el armamento en desuso de la RDA.
Recordaba a personajes políticos de
cuarta cómo camisetearon (así dicen los españoles)….al socialismo para instalar
un nacionalismo extremo como forma de aferrarse al poder, enfrentando a estos
pueblos en una tragedia que sigue hasta hoy. La destrucción de Yugoslavia fue
algo planificado desde el exterior porque ofrecía una alternativa al
capitalismo en tiempos en los que se había decretado “el fin de la historia”. Primero fueron ahogados económicamente y
luego los hicieron enfrentarse entre ellos, por los Valores, Dios y la Patria. ¿Les
suena?
*Favio Camargo. Docente, estudiante del Profesorado de Historia en la Universidad Nacional del Sur
Documental canadiense que echa una
mirada crítica al papel jugado por los EEUU, la OTAN y también la UE en la
trágica ruptura de un antaño pacífico y próspero estado europeo: Yugoslavia. http://www.weightofchains.com Boris Malagurski 2011
¿Alguna vez se preguntaron por qué
las superpotencias se inmiscuyen tanto en los asuntos internos de otros países?
¿Le parece extraño que alguien quiera arruinar una estructura económica exitosa?
¿Cómo puede un país supuestamente invadirse a sí mismo? ¿Les causa curiosidad
lo que sucede después de un bombardeo "humanitario"? Eurochannel les
invita a encontrar las asombrosas y sorprendentes respuestas en El peso de
las cadenas.
Dirigida por Boris
Malagurski, El peso de las cadenas es un documental, coproducido
entre Serbia y Canadá, que tiene como objetivo dar respuesta a las preguntas
que pocos se atreven a preguntar acerca de uno de los conflictos armados más
crueles después de la Segunda Guerra Mundial. La producción se explica cómo y
por qué se rompió Yugoslavia y quién tenía un interés en su disolución y la
devastadora guerra sangrienta que le siguió.
Develando el nivel de vida en
Yugoslavia antes de la guerra y contando algunos aspectos de su vida personal,
el director retrata un país con excelente calidad de vida antes de la guerra:
atención médica y educación gratuitas, derecho garantizado a un trabajo,
transporte público, vivienda y servicios públicos asequibles, una tasa de
alfabetización superior al 90%, una esperanza de vida de 72 años y más.
Eurochannel les invita a disfrutar de
un documental único que ha provocado controversia en todo el mundo durante sus
proyecciones en cines de Australia, Canadá y los EE.UU., así como en festivales
de cine en Londres (Raindance), Belgrado (Beldocs), La Habana, Ann Arbor,
Toronto, y muchos otros.
Sinopsis:
La tierra de los eslavos del sur ha
sido más influenciada por potencias extranjeras que cualquier otra región en el
mundo; explotados con saña durante siglos y ahora ven cómo Occidente se embarca
en un nuevo tipo de colonización. Un documental con una visión diferente sobre
las guerras yugoslavas. (Fuente: http://eurochannel.com/es)
El film está subtitulado en Inglés
ResponderEliminarEl vídeo de you tube le permite buscar el subtitulado de su preferencia. Lo acabo de comprobar. Saludos
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