Revista Nro. 21… De "librepensadores", "independientes", y "apolíticos".. por Antonio Diez, El Mayolero
Ya
hace muchos años que los vengo junando. Yo era muy pibe entonces (13/14 años).
Terminada la primaria, empezaba la secundaria y miraba por la rendija de la
puerta o por el ojo de la cerradura el mundo adulto.
Estábamos en 1954/55 y el peronismo-antiperonismo hervía. Yo carecía de
la madurez suficiente como para sacar conclusiones (aún sigo con mis carencias,
pero más atenuadas). En un hogar no-peronista donde sin embargo se leía la
revista De Frente que dirigía Cooke, y otras cosas similares, obviamente había
un ámbito de discusión bastante amplio.
Al confrontarme con el resto de la sociedad por ahí empecé a descubrir
que había otra subespecie humana, que eran los que dan título a este post.
Yo los escuchaba con avidez, ya que su exposición de ideas era
maravillosa. Sobre todo los librepensadores. Tenían todas las soluciones para
todos los problemas de la sociedad. ¡Que clarita que la tenían! Eso sí; de
repente te decían todo lo contrario a lo que habían sostenido con fervor, con
el mismo fervor de antes pero para el otro lado... Generalmente se manifestaban
socialistas y repetían con todo entusiasmo los discursos de Alfredo Palacios, y
citaban de memoria a José Ingenieros.
También estaban los independientes, emparentados con los librepensadores
en su defensa a ultranza de las libertades individuales, pero menos inclinados
a repetir puntos de vista comprometidos con lo social, tal vez por preservar su
independencia. También compartían la consigna "¡¡O acaso me van a impedir
que piense!!" que enarbolaban cuando alguien les intentaba refutar sus
aseveraciones, o confrontar sus contradicciones. O sea que la libertad de
pensamiento era o parecía ser su patrimonio exclusivo.
Los apolíticos eran gauchitos... Ellos eran eso: apolíticos. Lo que no
les impedía hablar de cosas políticas todo el tiempo, pero eso sí, ellos no se
metían en nada porque eran eso. Apolíticos. La consigna era común a los otros
dos grupos; "¡¡O acaso me van a impedir que piense!!".
Una curiosidad que observé fue que producido el golpe del '55, todos se
manifestaron (y actuaron en consecuencia) como fervientes antiperonistas, lo
que me dejó profundamente desconcertado. Tenga en cuenta mi estado de
adolescente-curioso-que-espiaba-por-por-la-puerta-entreabierta de un mundo de
pensamiento adulto que se le empezaba a mostrar contradictorio.
En el '58 asumió Frondizi la Presidencia; mi viejo se había sumado a la
UCRI, y yo seguía espiando por la rendija, ahora un poco más amplia, ya que en
la campaña se interactuaba con los Peronistas, que proscritos habían hecho el
famoso "Pacto", y con su coherencia organizativa se aplicaron a hacer
funcionar el asunto. Ahí empecé a tener contacto con los postergados y
perseguidos porque a ellos sí que se les pretendía impedir que pensaran.
Curiosamente, los librepensadores y los independientes no levantaban su voz
para condenar este hecho, a todas luces y desde su punto de vista aberrante.
Es más; con el ascenso de Frondizi, volvieron a aparecer, remixed &
reloaded, se diría ahora... Por ahí, yo empezaba a sacar conclusiones propias,
y sumando me daba que su aparición en escena siempre coincidía con el ascenso
de las clases populares, o su acercamiento al poder establecido (cosa que
también iba aprendiendo), nada tenía que ver con el Gobierno, al menos con el
que el pueblo elegía.
Curiosamente nunca levantaban su voz en épocas de Gobiernos Militares.
Por el contrario, justificaban éstos como algo inevitable dada la poca cultura
del pueblo que no era capaz de darse un Gobierno acorde con lo que ellos
pensaban, por lo tanto, las Dictaduras eran una especie de Purgatorio donde el
pueblo debía expiar sus culpas hasta tanto aprendiera a pensar...
Ahora siguen en la huella, siempre impolutos, siempre independientes,
siempre apolíticos, y siempre enarbolando su "libertad de
pensamiento". Hay dos categorías, a saber:
1)
los que siempre empiezan la conversación diciendo "Yo a los Kirchner les
reconozco que han hecho algunas cosas buenas, pero..." y te largan un
larga retahíla de cosas con las que no están de acuerdo. Cuando uno les pide
que enumeren alguna de las cosas que ven bien, jamás te contestan; lo que te
dicen es !Pero acaso me van a prohibir que piense! con lo que se van muy
orgullosos.
2)
los que ven todo maal, pero maaaaal y siguen creyendo firmemente que mientras
el pueblo no tenga libertad de pensar, nada va a mejorar...
Otros te cuestionan que uno tenga un blog, y te preguntan con agudeza
"Pero, ¿ustedes en sus publicaciones dan espacio a la crítica? Y no
entienden que nadie les prohíbe tener sus propios blogs donde expresen sus
puntos de vista, o entrar a hacer comentarios, pero claro, después hay que aguantársela,
porque los cumpas suelen tener la costumbre de no dejar pasar una. Pero ellos
pretenden que seamos oficialistas y opositores al mismo tiempo. Es más
pretenden que seamos opositores todo el tiempo, ya que jamás registran nuestras
discusiones.
Han pasado muchos años desde que miraba el circo por debajo de la lona,
algunas cosas fui aprendiendo, ¡¡y las que me faltan todavía!!! Pero he llegado
a una certeza; me tienen las bolas llenas los librepensadores, los
independientes y los apolíticos. Me quedo con Biolcatti o Llambías que no me
ofrecen ninguna sorpresa.
*Antonio Diez (El Mayolero), Periodista, Escritor, Ensayista, columnista del programa Voces Cooperativas, autor del libro Formación y Transformación del Sujeto Agrario, ex candidato a Intendente de Tres Arroyos por el Partido Intransigente
Me identifico mucho, con la prosa del Sr Diez .
ResponderEliminarAlguna vez, intentaré con escasas posibilidades, de plagiarlo .
Lo antes posible .
Son tiempos duros y escribir, claramente despojado, de irrelevancias, donde la pluma es solo un instrumento, una herramienta indispensable para plasmar, lo que uno intuye del autor : Decir la verdad. y permitirnos compartirla.
Buena Vida, Señor .
Muy bueno Antonio. Muy Bueno. Pedro Caramelli
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