Revista Nro. 15 LA LIBERTAD COMO CAPRICHO: JURASSIK PARK, SUSANA GIMÉNEZ Y EL POPULISMO por Ramiro Garzaniti
Fuente
El Tábano Economista
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original: AQUÍ
El significante “libertad” ha sido
una de las grandes banderas de la derecha internacional contemporánea,
contraponiéndola al socialismo y al anarquismo, sobre todo a partir del Siglo
XX. Básicamente la idea que proponen es la siguiente: el capitalismo
defiende la libertad, mientras que en otros regímenes la libertad se pierde a
favor de la igualdad (para quienes no son tan despectivos) o se pierde por el
solo por el hecho de que los regímenes comunistas están gobernados por
corruptos que desayunan bebes y almuerzan genocidios. Vale la pena traer un
viejo chiste pro capitalista de la Guerra Fría (chiste que solía citar Ronaldo
Reagan):
Se encuentran un perro
americano, uno polaco y uno ruso. El americano explica a los otros dos cómo
funcionan las cosas en su país. “En América –les dice–, si ladras mucho, en
algún momento llegará alguien y te dará un trozo de carne”. El perro polaco
dice: “¿Qué es carne?”. Y el ruso: “¿Qué es ladrar?”
“La Libertad” funciona como el significante vacío
aglutinador del que nos hablaba el filósofo argentino Ernesto Laclau. Con el
argumento de la libertad se puede lograr que una persona de clase popular que
le cuesta llegar a fin de mes salga a la calle a defender a una multinacional
morosa y corrupta defendiendo: “La Libertad”. Un significante vacío es aquel
que permite que cada unx de lxs comensalxs lo complete como desee. Por ejemplo,
en Argentina tenemos a “Cambiemos” y en el Reino de España tienen “Unidas
Podemos”. Pero, ¿Qué cambiaremos? ¿Qué podemos? Bueno, es un significante
vacío, cada uno lo completara como quiera y pueden confluir votando a la
derecha o a la centroizquierda. Esto es populismo. Lo ejemplos que traigo
son adrede, el populismo no es ni bueno ni malo, ni de izquierda ni de derecha,
sino una herramienta. Una herramienta que, debo decir, lamentablemente en
Latinoamérica las derechas han sabido hacer mejor uso y, como colmo, acusan al
resto de populistas.
Libertad es un significante que tiene un gran
capital simbólico en la batalla cultural. Tiene mucho peso, nadie quisiera ser
acusado de estar en contra de la libertad y todxs dirían que están a favor.
Pero también parece que el término tiene dueño, por que quienes usufructúan el
capital de dicha bandera suele ser la derecha: desde las consignas de la
Revolución Francesa (Libertad, Igualdad y Fraternidad) a la Estatua de la
Libertad en Nueva York, la tierra de la libertad.
En
Argentina tenemos nuestro propio think tank (tanque de pensamiento, usina de
ideas) “Fundación Libertad” que organiza congresos con invitados de lujo
como Mauricio Macri, José María Aznar (ex presidente del Reino de España y
escritor, justamente, de “Libertad Digital”) y el 1° Marquez de Vargas Llosa,
el escritor peruano-español, Mario Vargas Llosa. De paso sea dicho, el Marquesado de Vargas Llosa fue
uno de los últimos actos de gobierno del cazador de elefantes Juan Carlos I. En
Chile tienen el propio “Instituto Libertad”. Y si están leyendo esto en algún
lugar de América Latina, seguramente tengan sucursales libertarias de la
derecha internacional. El sociólogo y politólogo argentino Atilio Borón afirma
que estas fundaciones son utilizadas como intermediarios para que la Unión
Europea y el Gobierno de Estados Unidos puedan financiar el activismo derechoso
en la región evitando el sello postal que diga Washington o Bruselas en el fajo
de billetes. Pero esto sería tema de otra nota (o bien pueden leerlo a Atilio
Borón, recomiendo).
Reflexionemos entonces, ¿qué es la libertad? Como dice
la famosa frase “mi libertad termina donde empieza la de otrx”. Emmanuel
Levinas puso en cuestión esta sentencia. Si mi libertad termina donde empieza
la de otrx, entonces, yo podría, para extender mis libertades suprimiendo a ese
otrx. Quiero decir, puedo entonces, redefinir el término “otrx” y entonces seré
más libre. Pensemos, ¿Era una mujer negra esclavizada en la Norteamérica del
siglo XIX otra persona? ¿Lo era una familia judía en el Berlín de 1939? ¿Lo era
una familia de palestinos en la Jerusalén de 1949? ¿O una persona progresista y
de izquierda en la América Latina del Plan Cóndor?
La verdadera libertad entonces, no debería tener
como límite al otrx sino al otrx como sustento. La verdadera libertad implica
no oprimir a nadie, no deshumanizar. Yo seré libre en tanto tú seas libre.
Pero, ¿qué entiende la derecha por libertad?
Tomemos dos millonarios ejemplos: John Hammond y Susana Giménez.
El
primero es un personaje ficticio de la franquicia “Jurassik Park”. Hammond es
un megaarchimultimillonario que quiere y puede crear un parque de diversiones
con dinosaurios. Parque de diversiones completamente creado para una elite (si
Disney cobra 110 dólares la entrada, acá debería estar por lo menos 1000 dólares
por día, el T-Rex es de buen comer). En las primeras escenas de la película se
lo puede ver descendiendo con su helicóptero en un pozo donde se encontraban
arqueólogxs trabajando. Lxs arqueólogxs le piden que no lo haga porque está
dañando la excavación, también les dicen que no van a ayudarlo porque les
parece una locura su idea. Luego, John Hammon abre un champagne que no le
pertenecía, se lleva a lxs arqueólogxs y funda su soñado parque. Como sabrá la
mayoría (y sino, spoiler alert!), esto termino con decenas de muertos y
varios sobrevivientes que se llevaron tantos traumas que ni dos camiones llenos
de psicoanalistxs podrán con ellos. Se ve que el karma no existe, porque John
Hammond resulta ileso y no debe enfrentar procesos judiciales por múltiples
asesinatos dolosos.
Otro ejemplo más actual es la megaarchimultimillonaria
argentina Susana Giménez. Ella se encuentra ahora en el Uruguay, donde se fue a
pasar la cuarentena un par de semanas después de que el gobierno
argentino la decrete. Una vez allí dijo lo siguiente: “nadie puede encerrarme a
mi”….“en realidad habría que cerrar las villas”. Relean el
análisis de Levinas, acá sumamos otro ejemplo. Claro a ella no la podemos
encerrar, pero las villas si, ¿será que la Su está deshumanizando un poquito a
lxs villerxs? Hace no mucho, también había armado revuelo por una frase digna
de María Antonieta (“si tienen hambre que coman pasteles”): “Si hay pobreza que
vaya la gente al campo… bueno, no sé, hay que enseñarle a plantar, a tener
gallinas, que se yo…. cosas. De verdad te lo digo”. Por otro lado, la diva de
la TV Argentina fue condenada por no pagar impuestos y se queja de que en
Argentina se está perdiendo la libertad porque se está virando a un…..
adivinen…… comunismo! La que puede, puede.
Parece que para la derecha la libertad es más que nada un
capricho de gente adinerada. Si el capricho se puede comprar entonces es
libertad: “¿Por qué no puedo tener un parque con dinosaurios, si quiero?”;
“¿Por qué no puedo tener 8 yates, si quiero?” “¿Por qué no puedo tener una
fortuna superior al 40% más pobre de la población mundial, si quiero?”…. Todas
frases que posiblemente terminen con la gran falacia entre las falacias: “me lo
gane trabajando”.
Pero entonces que….? Debemos dejarnos de preocupar por la
libertad porque esto nos pondría en la misma vereda que el Márquez de Vargas
Llosa y Susana Giménez. De ninguna manera, la libertad es el tesoro más
preciado que posee el ser humano. Sobre esto trabajaron grandes filósofos,
desde Jean-Paul Sartre a Marx y Kropotkin. Debemos levantar la bandera de la
libertad pero creo que antes debemos resignificarla. Insisto, Emmanuel Levinas
aportaría bastante al tema. Debemos defender la libertad, pero no la propia,
porque eso es un capricho, debemos defender la libertad del otro y ahí
encontraremos la nuestra. Y bajo ningún punto de vista podemos dejar que nos
expropien tan hermoso significante.
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