Más de una vez afirmamos, acaso por haber
tenido alguna experiencia casual y olvidable de carácter laboral con este tipo
de psicópatas, que dentro del mundo Ceo la premisa es el fin, el objetivo
determinado, pero mucho también importan el plan y los medios para llevarlo a
cabo. Para que dicho fin sea considerado exitoso esos medios (las políticas
aplicadas-las herramientas) no deben medrar los intereses particulares y
colectivos de quien o quienes ese Ceo representa. Una vez logrado el objetivo
de máxima, el recurso se retira, con sus pautados dividendos, bajo la lógica
del desgaste, gestor el cual le deja paso a otro que cultivará las mismas
premisas para que el sistema preexistente a él, siga existiendo mientras él y
se reproduzca exponencialmente más allá de él. Caputo cumplió con la tarea
encomendada, profundizó el desastre que Federico Sturzenegger legó, el BCRA,
como asiento contable, afianzó su rol dependiente ante el FMI perjurándole su
obediencia debida al círculo de financiarización local e internacional, incluso
se permitió hacer algunas operaciones paralelas a favor de sus antiguos
mandantes quedándose con alguna honesta regalía. Caputo cumplió, su rol
extractivo de divisas a base del endeudamiento público ha sido un éxito, es
hora de unas merecidas vacaciones (las de la última corrida cambiaria, en Ipanema, no alcanzaron)
Tristemente nunca como ahora hemos visto con
marcada encarnadura la praxis ejecutiva sin intermediarios, esa fantasmal
alianza compacta de un poder real sin fisuras prescindiendo de la política, sus
protagonistas y sus herramientas. Esta extrema profundización que hace el
gobierno de la praxis neoliberal está reafirmando sus indicios excluyentes,
esquema que curiosamente los sectores medios aprobaron hace pocos meses a pesar
de sus conocidas contraindicaciones: Devaluación intempestiva, espiral
inflacionaria, quita de subsidios, despidos, techo paritario, inseguridad laboral
a cuenta de la flexibilización, horizonte recesivo, reducción de las
prestaciones estatales, transferencia de recursos a favor de los sectores
concentrados de la economía, amesetamiento previsional, dolarización del precio
de los servicios, una batería de medidas que implican establecer un supuesto
orden económico, sofisma gravado a fuerza de mass media, a favor de que los
número cierren. Caputo y Cambiemos cumplieron con las promesas que los llevaron
a la victoria hace menos de un año, Macri y Cambiemos cumplen, Caputo Dignifica..
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