Gubia y encuentro
Y fue tropezar con esa fracción de
durmiente, taco madero desprolijo e inasible. Imposible intuir que en su interior, y
vaya paradoja, usted se hallaba aletargada, a la espera de una mano libertaria.
A poco de comenzar a tallarla, mi gubia, informante del encuentro, la iba
pariendo de manera imprecisa y doliente, incluso alguna astilla previsora por
el aciago devenir dejó una ardiente huella bermellón como señal..
Le pido disculpas, como vulgar y
mediocre artesano no pude perfeccionar lo que atesoraba luz propia. Obedecí al
instructivo que su belleza recomendaba, solo fui esclavo de lo que ante mí se iba develando de forma pausada e imprecisa.
Un cambio de vías muertas en la cotidiana
caminata crepuscular contribuyó al azar. Sospecho que las musas artesanas hicieron
todo a su alcance para que tal cosa suceda, de todas maneras hubiera sido
imposible evitarlo ya que el leño se insinuó con suma gentileza e impuso sus
dominios a la espera de saber si mis ojos sorprendidos eran probos para leer
sus rasgos encubiertos.
Los críticos de arte del lugar, recurrentes
usurpadores de la afectividad, terminaron relatando que como artista jamás
estuve a la altura de tamaña belleza, y hasta osaron bocetarme como un trebejo
ilegal y obsceno, un casual instrumento de una obra de la que nunca fui merecedor.
Amén de los refutadores, usted fue
propietaria del póstumo dictamen, la pieza descansa en su rincón de preferencia.
Nublar los barnices naturales que posee y de los cuales no me jacto, resulta
coincidente con la actitud de aquellos malogrados que desean poseerla y que por las suertes
de amor jamás tendrán esa posibilidad. En mi caso prefiero extrañar lo que nunca
tuve, suena complejo, acaso puede considerarse un dislate, pero si me sucede
quiere decir que es posible.
En lo personal mi señora continúo con la
empresa, busco leños, intento erosionar sus excedentes, trato de intuir, entre los durmientes de las vías, el lugar en donde yacen esos
breves y esporádicos distritos de belleza, comisuras que
solemos esquivar por temor a enamorarnos…
Guitarrista, cantante y compositor británico de blues y rock nacido en
Leicester el 14 de noviembre de 1976. Su trayectoria y su volumen musical lo
acercan al selecto grupo de los elegidos del género.
el arte y la revelacion de la belleza escondida que otros no pueden ver ya sea en una frase, en una tela en blanco, en un instumento abandonado en un rincon, muy lindo.
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