"Hay que linchar a Gabriel Levinas" grita la masa, mientras Massa justifica. Otro chorro que queda suelto por el absurdo garantismo. Entran por una puerta y salen por la otra. El periodista fue inexplicablemente absuelto
El periodista y marchand Gabriel
Levinas fue absuelto en un juicio oral en el que estaba acusado por
presuntamente haber omitido devolver obras del artista plástico León Ferrari. El
tribunal oral número diez, con el voto unánime de los jueces Alejandro Becerra,
Jorge Alberto Bustelo y Silvia Mora, dispuso la absolución de Levinas tras un
juicio que insumió sólo una jornada.
El fiscal Carlos Giménez Bauer había pedido la pena de un año de prisión en suspenso por el presunto delito de "defraudación por retención indebida" de obras que Ferrari le había entregado para exhibir y eventualmente comercializar en París, que le fueron devueltas sólo parcialmente. Ello le habría generado a Ferrari, fallecido el año pasado a los 92 años, un perjuicio del orden de los 144 mil dólares. Levinas reconoció la existencia de una deuda, que justificó en que había debido utilizar el dinero para afrontar un problema de salud y luego intentó un plan de pagos con la familia de Ferrari que nunca fue aceptado. «
El fiscal Carlos Giménez Bauer había pedido la pena de un año de prisión en suspenso por el presunto delito de "defraudación por retención indebida" de obras que Ferrari le había entregado para exhibir y eventualmente comercializar en París, que le fueron devueltas sólo parcialmente. Ello le habría generado a Ferrari, fallecido el año pasado a los 92 años, un perjuicio del orden de los 144 mil dólares. Levinas reconoció la existencia de una deuda, que justificó en que había debido utilizar el dinero para afrontar un problema de salud y luego intentó un plan de pagos con la familia de Ferrari que nunca fue aceptado. «
Claves para entender la
causa
El 21 de abril de 2008, Ferrari le
entregó a Levinas 15 obras (13 dibujos y dos collages) en carácter de “préstamo”,
para exhibirlas y venderlas. El periodista admitió ante la Justicia que las
tuvo en su poder, que las llevó a exponer a la galería parisina Brun Léglise y
que efectivamente consiguió venderlas a un coleccionista identificado como
Roberto Brumberg. Justo cuando debió rendir
cuentas, Levinas "atravesó un estado crítico de salud que tuvo para él
enormes implicancias personales y profesionales, entre ellas de tipo
económicas”, según explicaron sus abogados, por lo que “debió afrontar
cuantiosos gastos para poder sobrevivir, y como no tenía dinero propio que en
tal sentido le alcanzara para ello, debió disponer del que había obtenido por
la venta de ciertas obras de arte (de Ferrari y de otros artistas) La Cámara,
en esa resolución, estableció con respecto a las obras, independientemente de
si eran para exhibir o vender, que Levinas “debió restituirlas en el primer
caso o bien efectuar la correspondiente rendición de cuentas de haber sido vendidas
como lo manifestó, sin que por el momento se encuentre acreditado que haya dado
cumplimiento a alguna de dichas obligaciones”. En este sentido, es necesario
aclarar que cuando salen del país piezas artísticas para una exposición, se
debe realizar un trámite administrativo en la Cancillería que cuantifica,
aproximadamente, su precio. Según consta en el expediente, esa suma asciende a
144.199 dólares".
Esto quiere decir que si el flaco que agarró Romano afanando un reloj demuestra que lo hizo porque tenía una enfermedad que solventar y que luego devolvería la suma quedaría libre de culpa y cargo. Ja ja... Esto se llama injusticia clasista. Por esas cosas las cárceles están llenas de pobres y estos hijos de puta como Levinas nunca correrán riesgos de ser detenidos.
ResponderEliminar6.18. Sería un atentado en contra de la libertad de prensa. Imaginate el circo que armarían desde el oligo-polio
ResponderEliminarSiempre los perejiles
ResponderEliminarPensar que yo lo escuchaba a este sujeto en la radio. Ayyy! las cosas que ha hecho uno.
ResponderEliminarBueno Daniel, yo lo leía muy entusiasmado en El Porteño. La gente puede cambiar o no de idea, cosa que no me achaco ni le achaco a Levinas. No estoy afiliado a los que sostienen como desdoroso tanto una cosa como la otra. Pero de allí a especular comercialmente y malversar un trato con un nonagenario es como mucho.
ResponderEliminarChorro de guante blanco bancado por la massa media.Qué nos sorprende.
ResponderEliminaren su pago si que saben de eso
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