FPT y algunos detalles para tener en cuenta sobre la publicidad real, la que se emite, y no la que recorre el imaginario opositor
Un cuervo sobrevuela la "propaganda" de Fútbol para Todos
por Carlos Aletto para Diario Registrado
Mi pasión (como la de muchos argentinos) es
el fútbol; en mi caso San Lorenzo de Almagro ocupa un lugar importante en mi
vida tanto o más que la literatura. El domingo, sufriendo por televisión como
River nos bailaba, me entretuve viendo (y tomando nota) de la tan criticada
“propaganda” en Fútbol para Todos. Vaya sorpresa me llevé al ver la lista
final. La “terrible publicidad oficialista” durante la transmisión del clásico
de la fecha fue la siguiente:
Durante el primer y el
segundo tiempo del partido aparecieron:
1) Teléfonos
(0800-222-1133) y dirección de página web de Sedronar para luchar contra el
paco,
2) donación de órganos,
página del Incucai, (0800.555.4628),
3) calendario de vacunas
(0800-222-1002),
4) programas de canal 7,
5) línea telefónica de
atención a las víctimas de violencia de género (144) y
6) ofertas con tarjeta y en
cuotas sin interés de vuelos en Aerolíneas Argentinas.
En el entretiempo, durante
la pausa publicitaria, la tanda fue la siguiente:
1) Precios cuidados
(0-800-666-1518),
2) Mundial de Brasil en la
TV (gratis y en HD),
3) institucional de Fútbol
para Todos,
4) todos goles de la fecha
hasta el momento,
5) Iveco: sponsor oficial
de FpT,
6) flash informativo de
Visión 7,
7) noticia sobre la primera
formación de trenes de las nuevas 25 que llegarán este año para la línea
Sarmiento
8) campaña para demostrar
que donar órganos salva vidas (spot).
Reparando en esta lista de
la publicidad durante la transición del partido y repasando mentalmente las que
recordaba de partidos anteriores (páginas para anotarse a los planes de
viviendas, datos para quienes están en edad de jubilarse o para jubilados, cómo
terminar de forma accesible y gratuita a los estudios primarios y secundarios,
página web de asignaciones familiares, etc.) pensé que Fútbol para
Todos no puede ser la discusión de fondo de ningún problema, porque por un
lado brinda de manera abierta y gratuita los partidos de fútbol y, por otro, es
muy eficiente a la hora de comunicar las obras realizadas y los programas brindados
por el Estado.
Por lo tanto la discusión
debe ser de fondo: ¿El gobierno debe dar a conocer sus obras, sus programas e
informar su postura política en temas sensibles? Si es que no: se acaba toda la
discusión. Sin embargo, a mi entender (y al de muchos) el ciudadano debe
conocer las obras que realiza el gobierno, los programas que existen, las
formas de contactarse y anotarse a los mismos, conocer los medios de accesos y,
también, el ciudadano debe saber cuál es la mirada o la postura política del
gobierno electo. No me parece pertinente que los 40.000.000 de argentinos deban
estar al margen de estos datos, o que le llegue de forma distorsionada por los
intereses mezquinos de otras empresas de medios de comunicación masivos. Hay
que encontrar la forma más eficaz de informar a semejante masa, lo cual en sí
mismo es una tarea titánica.
Ahora, si decidimos que el
gobierno debe comunicar estos datos a todos los ciudadanos ¿qué porcentaje
tiene que tener la partida de "comunicación" dentro del presupuesto?
Insisto, siempre que estemos de acuerdo que cualquier argentino, ya sea el que
vive en la Quiaca o el que habita en Ushuaia o en cualquier rincón escondido
del país debe tener el mismo derecho a informarse, por lo tanto el Estado debe
hacer un esfuerzo económico y de gran efectividad. El fútbol en nuestro país es
el acontecimiento cultural de mayor alcance: se consume en la mayoría de los
hogares de todas las ciudades y parajes de la Argentina, por lo tanto no hay
medio más efectivo para comunicar las obras, los programas y las ideas del
gobierno que con el fútbol. El fútbol fue durante muchos años un negocio de
empresas privadas que vendía esa pauta publicitaria a marcas de vinos,
gaseosas, indumentaria deportiva a miles de millones de pesos (o dólares,
moneda con la que le gusta pensar a esas empresas); juntaban miles de millones
con la publicidad, con la venta a los cableoperadores, con el decodificador y
los extras para ver los clásicos (el famoso (pagar para ver o pay per view). Y como no era suficiente condenaba a la
mayoría de los televidentes a ver las tribunas de fútbol durante la transmisión
y esperar las repeticiones de los goles a la medianoche del domingo.
Este espacio estaba ocupado
con estos negocios, por lo tanto ¿Cómo comunicaban los gobiernos
nacionales anteriores sus actos y qué porcentaje del presupuesto general
usaban? ¿Cómo comunican los gobiernos municipales o provinciales y que
porcentaje usa esa partida presupuestaria?
Por lo general las partidas
de dinero eran el mismo porcentaje e iban (o van en el caso de gobiernos
locales) a las empresas de comunicación más grandes: a sus medios gráficos,
radiales y televisivos. Los grandes beneficiarios de las partidas
presupuestarias de comunicación fueron históricamente los medios oligopólicos,
a partir de la década del 90 el Grupo Clarín llevó la mayor parte.
Los gobiernos municipales y provinciales siguen destinando gran porcentaje de
esas partidas a estos medios, donde además por ser clientes compran (sin
demasiada garantía) una fuerte protección mediática.
La efectividad en relación
al costo de comunicar que tiene el Fútbol para Todos es evidentemente
muy alta, su rendimiento es exitoso. Las obras y los programas del estado son
conocidos por sus beneficiarios o potenciales beneficiarios: jubilados,
estudiantes, no escolarizados, mujeres maltratadas, excluidos, personas sin
vivienda propias, etc.
Por todo lo anterior pienso
que el tema en discusión del Fútbol para Todos debe ser otro, ya que
nadie duda (salvo quienes se beneficiaban económicamente) que el fútbol
argentino no debe ser administrado por empresas que escandalosamente abusaron
de contratos millonarios, excluyendo a gran parte de los argentinos del
espectáculo más popular. Los temas en discusión deben ser 1) si un gobierno
debe destinar a comunicar a sus ciudadanos sus actos Y 2) cuánto debe ser el
porcentaje del presupuesto que debe destinar un gobierno para comunicar. ¿Qué
sería de la existencia de los programas educativos, de viviendas, jubilatorios,
de salud si no fuesen conocido por los ciudadanos? Desconocer su existencia
sería un fracaso, un gasto inútil en la implementación. Con las obras
realizadas por el Estado lo mismo; no ser informadas dejaría afuera de las
mismas a millones de argentinos, que se preguntarían que se hace con el dinero
de los impuestos (pregunta que los que no quieren estar informados igual se
hacen).
En conclusión, en un acto
de alquimia, convirtiendo en oro el carbón de la derrota de San Lorenzo, llegué
a la idea final que el Fútbol para Todos, además de brindar de manera
abierta y gratuita (y en muchos casos en HD), comunica de una forma
eficiente lo que se hace con el resto del porcentaje del dinero argentino y se
gasta un porcentaje muy bajo (0,6 %) para una tarea tan gigantesca: llegar con
información relevante para todos los argentinos.
"Fútbol
para todos tendría que ser manejado ad eternum por el Estado" – Alejandro Fantino
"Está
bien lo que hizo el Gobierno de estatizar el fútbol y sacárselo a manos
privadas, estoy de acuerdo", aseguró el conductor de Animales Sueltos, que
anoche regresó a la pantalla de América con la sexta temporada del ciclo. Entrevistado
por Radio Del Plata acerca de su posición respecto de las trasmisiones en
directo del deporte más popular de la Argentina, Fantino agregó que "el
Fútbol para Todos debería ser manejado ad eternum por el Estado" y fue aún
más allá indicando que la televisación de los partidos "nunca más debería
volver a estar en manos privadas". "Como tipo del interior,
que la gente tenga el partido gratis en la casa me encanta", afirmó el
excéntrico conductor, y manifestó que le gustaría que la Televisión Pública
pueda llegar a todo el país sin necesidad de tener que pasar por un operador de
cable.
Fuente: Diario Registrado
Gustavo
ResponderEliminarNo se si te acordás que en Guisasola, hasta la llegada de DirecTV, el único operador era Cablevisión con sólo 13 canales y en su grilla no incluía a la TV Pública. Recuerdo cuando desde la Biblioteca hiciste un petitorio y una junta de firmas para presentar en la empresa. Cinco firmamos en total.
saludos Gustavo
Nelson Castro por ejemplo argumenta que ningún gobierno debe hacer propaganda de sus actos (aunque luego no dice ni mu sobre la propaganda de Macri), sin explicar que tiene de malo que exista esa propaganda. Y muchos piensan como él.
ResponderEliminarEs el criterio de que la libertad de expresión existe sólo para los opositores y no para el oficialismo.