ELECCIONES 2013. LO QUE QUEDARÁ EN LA HISTORIA. LO QUE NADIE JAMÁS PODRÁ DESTRUIR... (El recuerdo de los años felices)

 

En aquel tiempo hubo un fundado deseo de justicia y de dignidad frente a una sociedad fría e individualista que excluía a los pobres de la manera más deplorable, sentenciándolos a esa suerte de centros clandestinos posmodernos. A la par muchos intelectuales, periodistas y analistas, en lugar de responder ante las penurias de esas personas, se habían entregado a la ignominia de sus propios y mezquinos intereses. A todos esos desplazados los supo movilizar el Kirchnerismo. Eran los excluidos; ya no eran los de abajo, eran los de afuera... Como sentenció Albert Camus: uno no puede ponerse al lado de los escriben la historia, sino al servicio de quienes la padecen...

Tiempo después las sepias fotos de Néstor y de Cristina, tutelan, junto a la imagen de la Virgen, los ambientes más humildes del país, simbolizando con celo y lealtad aquellos años únicos de felicidad y respeto por los antes desclasados. Con los errores que todos conocemos hubo gente honrada y  maravillosa que luchó a favor de esos paradigmas y de los cuales fui amigo y admirador.

La patria es un dolor muy profundo que no sabe su nombre afirmaba Marechal.

Cada generación que viene se presume destinada a rehacer el mundo. Nosotros, por edad, ya sabemos que no podremos hacerlo. Acaso nuestro aporte mayor consiste en facilitar su tarea haciendo todo lo posible para que ese mundo anhelado no se destruya en el intento.

* Texto propio inspirado en algunos pensamientos sueltos y finales de Ernesto Sábato