Tras el museo de la memoria

 y la fragata, habló Darín (el neutro)


Mueve a risa que desde las usinas más putrefactas, salones tapizados con los cuerpos de los muertos, recintos barnizados con su sangre, los cómplices de la dictadura se muestren ofendidos y críticos por el evento que el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos organizó con motivo del fin de año en el Museo de la Memoria. Mas allá de la precariedad política y argumentativa que ostentan muchos advenedizos expectorantes  sopretexto de mostrase como eficaces opositores,  - curioso es que lo hagan desde las corporaciones más ligadas con la dictadura - bueno me parece expresar que los espacios públicos testimoniales deben preservarse como tal, no sólo por respeto a víctimas y deudos, sino además como eficaz herramienta en contra del olvido. A mi entender hubo cierta banalización del espacio, cuestión que con discontinuarla alcanza y sobra. De todas maneras, y por fuera de nuestros posicionamiento personales, nada más apropiado que la expresiones de Hebe y Estela para colocarnos en nuestro justo lugar.

Ya estamos acostumbrados al armado de operaciones políticas alrededor de asuntos menores; es asignatura cotidiana en personas, que como plataforma de lanzamiento, sólo se reservan para sí, como mensaje político a la sociedad, el supremo derecho a la imbecilidad – aclaro que soy visceralmente democrático, jamás me atrevería a censurarles dicha elección individual -.

La diputada opositora Victoria Donda, nacida en la ex Esma, no está de acuerdo con lo sucedido y son perfectamente atendibles sus argumentos humanos – no los políticos -. Si estaban conformes muchos otros jóvenes nacidos en ese mismo predio, y del mismo modo son muy atendibles sus razones. ¿Cuál es el debate político profundo entonces? Pues ninguno. Apreciaciones distintas sobre las representaciones que tienen los espacios testimoniales y su relación con la historia, visiones e interpretaciones disímiles, no más que eso. El resto es pura especulación mediática de los que nunca hicieron nada por revisar la historia.

De allí a solicitar juicio político a un Ministro sólo puede caber en la cabeza de un desquiciado como Micheli y sus seguidores de ATE, en las minusválidas testas de ciertos caraduras que exhiben llamativas amnesias sobre la obediencia debida y el punto final, o de aquellas corporaciones que intentan desde hace una buena cantidad de años lacerar toda acción política del ejecutivo nacional. Me gustaría saber cuántos de estos íconos combativos hacen presencia viva o hubiesen potenciado los juicios por la verdad; nada más testimonial y simbólico que laborar efectivamente por los DD.HH desde la práctica explícita y el compromiso a favor de la justicia terrenal.

La Diputada Socialista, gustosa por portarse mal, invitada recurrente por aquellos cómplices que mataron a sus padres, no sólo expone con su actitud una de las tantas caras que tiene nuestra historia, es además el peor de los mensajes posibles, ya que coloca su personal visión política, sesgada y parcial, por sobre lo que efectivamente se ha avanzado en la materia durante esta última década. ¿Creerá Donda qué sus interlocutores, sus aliados políticos, se hubiesen atrevido a poner sobre el banquillo a la caterva de asesinos?. ¿A esta altura se puede seguir creyendo en Donda como entidad histórica testimonial? En lo personal no me resulta una figura significativa en la materia. Respeto su dolor, si es que aún lo mantiene.

Victoria Donda, al igual que su compañera Norma Morandini, representan solamente su proyecto político personal, de modo que instalarlas como entes universales sobre la temática de derechos humanos es una cuestión meramente especulativa para la cual se prestan con sumo altruismo. Ninguna de ellas está interesada en la verdad, en la memoria y en la justicia ya que se hallan arropadas y mimadas por aquellos que no están interesados en la verdad, la memoria y la justicia. Y eso lo saben, lo asumen y lo aceptan, debido a que ese lugar se ha constituido como su sitio de pertenencia, único salvavidas que tienen al alcance en medio del mar de la política. Donda y Morandini, de manera casi inercial, recorren los mismos senderos que Pato Bullrich: Viaje que va desde las convicciones de una izquierda militante con resultado incierto hacia la confortabilidad que proponen los secretos de las corporaciones dominantes.

Volviendo al tema del evento estimo que la impericia y cierta dosis de elementalidad volvió a exhibirse en algunos cuadros kirchneristas. De todas formas judicializar un brindis de fin de año habla de la poca capacidad que tiene la oposición para ofrecerse como colectivo pensante. Lo de O´Donnell, Lanata, Alfano, Castro, lo del oligopolio, resulta más de lo mismo, claros signos de malevolencia informativa. Son malas personas, inquisidores por naturaleza, y a las malas personas, a los inquisidores hay que enfrentarlos con inteligencia no con maldad. Y sospecho que aquí, de parte del oficialismo, la inteligencia estuvo ausente sin aviso.

Veamos la otra historia de estos días. Hoy, los profetas del odio, dicen estar contentos por el regreso de la Fragata Libertad.

Breve digresión: Si el Buque es inembargable, es decir detenta vía libre de circulación, cosa que desde un comienzo sostuvo el Gobierno, y es lo que la justicia internacional finalmente dictaminó, qué responsabilidad insisten en adosarle al Gobierno por el trayecto escogido. Acaso atracando en el Puerto de Nueva York o en el de Sydney el resultado pudo haber sido el mismo. Un  juez inescrupuloso temeroso de los fondos buitre que crea un problema. Esto es más o menos parecido a que si me detienen en un destacamento, digamos Tres Arroyos, en donde se trata de secuestrarme el vehículo sopretexto de un tecnicismo ilegal,  muy a pesar de contar con toda mi documentación en regla incluyendo la totalidad de los insumos obligatorios. ¿Qué responsabilidad me cabe al haber decidido la Ruta 3 como camino? ¿Desconocer que un atorrante se hallaba agazapado en busca de un mendrugo?...

Pues muchos sabemos que es mentira dicha alegría, sino en su momento no se la hubiese planteado como un triunfo del Gobierno – una victoria contra quién me atrevo a preguntar, o lo que es lo mismo quién se sintió derrotado-. Resulta ahora que el Gobierno toma el guante de ese mismo argumento mediático vilmente instalado de ex profeso preparando una bienvenida para algunos exagerada, sin embargo dicho triunfo gubernamental ya dejó de serlo debido a que estamos “todos contentos”. Pues váyanse a la recalcadaconchadesusmadres. Invocaban oraciones de toda clase y tenor para que la Fragata fuese confiscada o en su defecto el Gobierno se vea obligado a pagar. Encendían velas delante de la foto de Griessa, deseaban el default técnico, al mismo tiempo persisten en insistir sobre la intromisión del ejecutivo en la justicia muy a pesar de la cantidad de fallos adversos. Son perversos, ignorantes, malevolentes, en resumen, una lacra y como tal actúan.

Con esa gente acuerda Ricardo Darín cuando dice lo que dice. El gran actor argentino intenta hacer equilibrio y no lo logra. Nunca nadie dijo que quién ostenta el 54% te la manda a guardar, lo que se sostiene es que las decisiones de las mayorías deben ser respetadas. No existe persona más totalitaria que aquella pretenciosa por imponer sus políticas sin haber obtenido credenciales democráticas para ello. Tampoco es un secreto el patrimonio de los Kirchner. Que no le guste o no crea en las declaraciones juradas publicadas es otro tema que no guarda relación con asuntos que solapadamente pone bajo sospecha. De todas formas no es Ricardo Darín el más indicado para levantar dedos inquisidores cuando de la obtención de bienes se trata. Hay amnesias que no son recomendables. Entre Darines me quedo con la menos famosa, con Alejandra, la menos expuesta, la que no intenta hacer equilibrio, la que no especula con un deber ser mediático conveniente, la que puso su coraje cuando de compañeros despedidos por Canal 13-Clarín se trató, épocas en las que el famoso interprete de El Secreto de sus Ojos solía regodearse entre Mercedes Benz, pajas vizcacheras, viejas fascistas y sillas de ruedas, elementos indispensables para la obtención de un prestigio (bonanza) que sin dudas, de aquí en más, tendrá la obligación de defender éticamente con responsabilidad dialéctica. Está en su derecho. Lo maravilloso de esta época es que hasta al mejor actor se le cae la careta.

“De los más diversos instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin dudas, el libro. Los demás son extensiones de su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista; el teléfono es la extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada, extensiones de su brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una extensión de la memoria y la imaginación” (Jorge Luis Borges)

Cuánto de lo que expresa Borges falta en nuestra política contemporánea. La oposición, noble dignataria de la agenda corporativa, se detiene en las extensiones de los sentidos y del cuerpo: Micrófonos, cámaras, maquillajes, luces, patrocinantes, albaceas. No percibe hasta el momento que la política también tiene sus extensiones. Evidentemente y por ausencia de inteligencia y libertad aún, dichas extensiones, no las han podido visualizar.



Comentarios

  1. Darin es un muy buen actor.De dudosa moralidad en cuanto a evasiones varias por lo cual haría bien en callar.
    En cuanto al tema de la Esma...es largo y opino en mi blog

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  2. Como quiera que sea, resulta sorprendente la cantidad de gente que recién ahora parece haberse enterado de lo que pasó en la ex-ESMA.

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