Mateando
con la ciencia. Hoy ceba Phillippe Pinel
En tiempos antiguos las personas
aquejadas de enfermedades mentales se consideraban afectadas por algún tipo de
influjo divino y eran tratadas, si se daba el caso, con reverencia y respeto.
En cambio, en la Europa cristiana (influida por los relatos de posesión
diabólica del Nuevo Testamento) se consideraban infestadas por los demonios, y
en ocasiones eran maltratadas físicamente a fin de forzar que esos demonios
abandonen sus presas. Los dementes eran asimismo tratados como sujetos de
irrisión, y los asilos de orates se consideraban lugares divertidos de visitar,
pese a que en ellos se desarrollaban espantosas pesadillas de gritos y gentes
enloquecidas, encarceladas y a menudo sujetas al tratamiento más brutal. El
médico francés Phillippe Pinel consideró que los psicóticos eran enfermos
mentales y que merecían un tratamiento digno (Manicomios), como el que se
dispensaba a los enfermos del cuerpo. En 1791 publicó opiniones acerca de la
enajenación mental, o sea acerca de la mentes enajenadas de la función que les
es propia. Debido a ello y durante un tiempo, los médicos que se especializaban
en enfermedades mentales se llamaron alienistas.
Fuente: Isaac Asimov
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