tag:blogger.com,1999:blog-6598640520170554828.post8954852423145934456..comments2024-03-25T18:34:13.034-07:00Comments on Coronel Dorrego - Buenos Aires: EL SISTEMA MÉDICO CUBANO, SU EFICIENCIA Y SU SOLIDARIDAD ANTE LA CRISIS DEL ÉBOLA… hasta los yankees reconocen, alaban y agradecen…Nos Disparan desde el Campanariohttp://www.blogger.com/profile/06746859449785154876noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-6598640520170554828.post-58150360444510943132014-10-08T06:27:28.676-07:002014-10-08T06:27:28.676-07:00Mientras los cubanos trabajan, la medicina del PP ...Mientras los cubanos trabajan, la medicina del PP mata perros<br /><br />El Perro<br /><br />Como si fuera el Toro de la Vega, las autoridades sanitarias han decidido matar el perro de le enfermera, infectada con el virus del ébola, y sin ponerlo en vigilancia como a su marido, al que no han eliminado, y que suplica por la vida de la que para ellos es su canasta de flores diarias. El 60 % de los italianos confiesa que quieren más a su perro que a su mujer. Aun no siendo trasladable a España, se comprenderá el dolor del lamento del marido aislado, quien afirma que el perro está bien y tiene comida y agua para bastantes días. De entre todos los perros rintintines que la vida, la literatura y el cine han hecho famosos, éste será el más triste e inocente. Como si lo hubiéramos abandonado en una gasolinera – él no lo haría – y un camión lo hubiera aplastado, su muerte nos dejará una sensación de asesinato colectivo. Sería interesante conocer la opinión de los miles de médicos que tienen perro. Los hombres, y las mujeres, somos perros imperfectos. Esperemos que el marido se quede sin perro, pero no sin mujer.<br /><br />Los vecinos sentirán alivio o porque no tienen perro o porque no es el suyo. Y los médicos y los políticos no se sentirán verdugos, pese a no tener ni puta idea de la conveniencia científica del perricidio, llegando a decir que un perro infectado no da positivo en los análisis. ¿Se buscará y perseguirá también a todas las personas y perros con los que haya tenido contacto Excálibur, una caricia en un parque, un amago de apareamiento en una esquina? Dan manotazos al aire de su ignorancia, mientras los ojos del perro serán dos llamas líquidas y acusadoras, dos preguntas húmedas en el recuerdo de nuestro pavor. Excálibur ha sido nuestra tercera víctima del ébola. Esperemos que Teresa Romero no sea la cuarta y ella y su marido Javier Limón puedan disfrutar de otro perro, aunque ya nunca será lo mismo.Anonymousnoreply@blogger.com