La derecha mata
cuando es investigada y mata cuando el muerto le es de suma utilidad para sus
objetivos de máxima. Debido a esto, debido a que la derecha mata, nunca tuve
dudas sobre quién empujó al suicidio a Nisman, como no tengo ninguna duda que
la caída del avioneta del Juez que llevaba adelante la causa Odebrecht no fue
un accidente.
De este modo, por
un lado le advierten al sistema judicial sobre sus límites investigativos a la
par de aconsejarle que no se interponga y avale sus egoísmos de clase, y por el
otro lo adoctrina para que persiga a todo aquel que se oponga a su hegemonía.
Planteados los términos
jamás la lucha política dentro del sistema será pareja, resulta de una inocencia
supina pensarla incluida dentro de un marco ético o moral, republicano. En
consecuencia la democracia así aceptada, bajo estos postulados, es solamente un
eufemismo de una pequeña burguesía que no tiene inconveniente alguno en ser
vetada en sus libertades, intereses y decisiones.
Comentarios
Publicar un comentario