Crítica a la resistencia absurda




Las estupideces en las redes no es cuestión privativa de nadie, nosotros, me refiero al colectivo kirchnerista, poseemos un buen número de “piolas” que se sospechan poseer una superioridad moral distintiva que les permite examinar a los compañeros so pretexto de índices evaluatorios tan antojadizos como sorprendentes. Durante el día de ayer leo una nota en donde se afirma que el Papa Francisco se ha comprometido con los organismos de derechos humanos para acercar todos los archivos que el Vaticano tiene de los tiempos de la dictadura. Obviamente que mucha gente mostró su satisfacción ante el titular entendiendo que una entidad generalmente silente abría sus puertas para temas vedados.
Y la miserabilidad “amiga” comenzó a exhibir sus mejores túnicas. Para colmo dicha nota tenía un copete o comentario laudatorio por parte del autor a modo de gancho. De inmediato el bardo comenzó a inundar el post debido a que la entrega tenía algunos meses. El argumento socarrón se cimentaba en que la mayoría éramos una manga de tarados, ignorantes, no leídos y peor informados, debido a que no habíamos reparado sobre la antigüedad de la nota.  
Vayamos por partes. Uno no espera que la trampa y el embuste parta de trincheras amigas, uno toma sus prevenciones por fuera del colectivo más allá de saber sobre aquellos opositores que se meten a jugar con nuestras convicciones. Sospecho que para la mayoría de los participantes el disparador era lo suficientemente interesante como para no detenerse en que la noticia tenía 9 meses de antigüedad. En segundo término me permito sostener que las temáticas que promueven los debates en las redes sociales están por encima de la temporalidad y si uno observa un inciso interesante muestra su opinión hoy porque acaso en su momento se le había pasado por alto, cuestión comprensible si entendemos que el acceso a la totalidad de la información va de la mano de la concentración de los medios. Soy de los cuelgo en mis espacios viejos artículos, aclarando siempre, por supuesto, que sirven como disparadores del presente. No todo el mundo tiene la posibilidad de estar cuatro o cinco horas delante de la PC para chequear y recontra-chequear cada cosa que se dice. Se supone que en un sitio amigo no será embaucado y menos bardeado.
Y uno comienza a tropezarse con ciertas explicaciones posibles del porqué de la cerrada derrota electoral. Estos piolas de café, bananas que les dicen a las minas groserías, cobijados y escondidos por un grupo de iguales, no hacen otra cosa que regodearse humillando, no aportan al debate, instalan una celada para luego embestir contra aquel tipo que de buena fe y sin prevenciones se invita a participar. Cuidado, no es dable dentro de la política la humillación como mecanismo militante de convencimiento. Lo interesante es que todavía estoy esperando que me respondan cuál es la fecha límite de caducidad periodística y analítica para que un disparador pueda o no ser debatido. Por tanto el sistema de evaluación es subjetivo ya que imponen una tabla de valores antojadiza. Ergo, mientras el soberbio da prioridad a la fecha como vector clasificatorio nunca se permite pensar que el lector privilegia la temática y el disparador.
Para colmo, una joven, defensora de la tesis sobre la imbecilidad colectiva, se victimizó pidiendo por favor un lugar en CABA para suicidarse. En lo personal le recomendé las Torres Le Parc de Puerto Madero, aunque considero que como la metáfora refería a una noticia que está a punto de cumplir un año la habrá considerado no ha lugar.
Último detalle. El mencionado suceso se dio en el marco de un sitio colectivo que se titula Resistiendo con Aguante.  Que me disculpen, pero si algunos participantes de ese conjunto piensan resistir con soberbia no creo que muchos los aguanten con gracilidad…


Comentarios

  1. No se haga mala sangre con esos avatares del submundillo digital. El anonimato y la ausencia de contacto físico que se dan en estos antros de la perdición, hacen que muchos y muchas actúen con agresividad, osadía y desvergüenza, precisamente porque en la vida real son personas inhibidas y bastante grises que de ningún modo tienen el coraje de actuar así. Lo que puede hacer, es colgar este post en ese reducto "militante" a modo de advertencia a los administradores, que sospecho, no están de acuerdo con ese tipo de actitudes ya que según tengo entendido son militantes en serio y con amplia trayectoria, y nada más. Esperar lo mejor.

    Pero repito, esas son las reglas del juego del mundo digital. Una mierda, sí. Por eso tuve facebook y borré mi cuenta. Tuve tuiter e hice lo mismo. Me envenenaba más de lo que me aportaba. Creo que no es sano. Consume tiempo, energía, embarulla la cabeza, que se yo.

    Como sea, la militancia se hace en la calle y poniendo el cuerpo, siempre fue así, y eso nunca va a cambiar.

    Buen día.

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    1. Juan Guillermo: En el último párrafo de su texto es en donde sigue estando la política como protagonista, en las redes es simplemente actriz de reparto

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  2. Los que somos viejos Peronistas y Peronistas viejos, sabemos que es cierto eso de que "la lucha se da en la calle" y poniendo el cuerpo. Este gobierno depredador tiene un plan que no cierra sino es con mucha desocupación. Porcentajes de 25% o más para disciplinar y querer doblegar al trabajador. ¡YA lo hemos vivido!, lo hemos enfrentado, lo hemos combatido y lo HEMOS DERROTADO. Claro que este aprendiz de dictador ordenará reprimir. Pienso que habrá muertos. Y que como siempre los que morirán serán humildes trabajadores, quizás para entonces estarán desocupados. La clase mierda recién reaccionará cuando también pierdan sus trabajos. Hasta ese entonces seguirán haciendo la plancha con sus mentes secuestradas por el veneno de la propaganda odiadora. No al pedo siento que vivimos en un país en que el 51% de la población votó para que el 5% se haga mucho más rico, y el 95% mucho más pobre.

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  3. Auch. Lo cierto es que la redes sociales tienen un poco de todo. Para bien y para mal. Y sí, hay mucho piola que juega al "políticamente incorrecto",el eufemismo para no decir canallas malnacidos.
    Pero es el lugar donde se sienten nativos los más jóvenes,y es un espacio más de militancia por mucho que eso disguste a los más ortodoxos, que no me engaño,siguen viendose como los únicos militantes verdaderos,mientras nos miran con desdén a los demás...

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  4. Ah,y esa manía de hacerse el culto citando a Cipolla como hizo la potencial imitadora de Nisman es muy curiosa. Porque quiénes lo hacen jamás se incluyen a sí mismos en la supuesta mayoría de imbéciles.
    Es casi como la versión intelectual de la predestinación de Calvino. Se supone que se salvan pocos pero que uno está entre los que se salvan,sí o sí...
    Y es que la estadística es tan poco cercana al sentido común :-(

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